La genética es fuente de polémica en muchos círculos cuando se usa para controlar la recreación de organismos, pero es todo un hallazgos cuando se usa para manipular el material defectuoso de un ser humano y con esto nos referimos a cambiar la pauta de células enfermas o disfuncionales por unas sanas y trabajadoras. Esta clase de técnicas se utilizan para curar/tratar muchas enfermedades como el cáncer o el sida, pero también para técnicas de reproducción. Hoy os hablamos de cómo se ha usado para engendrar un bebé sano con dos mamás y un papá.
Tener 3 progenitores es, desde luego en condiciones de buenas relaciones entre ellos, una suerte. En el caso que vamos a contarlo no se trata de una pareja de mujeres y la ayuda de un sujeto masculino para poder tener descendencia común, cosa que podría darse si la legislación no fuese más lenta que la vida y las necesidades reales de su sociedad, sino de una técnica para impedir malformaciones y enfermedades.
En Inglaterra, una mujer sorda ha concebido a un hijo sin transmitirle su sordera. En esta paciente esta discapacidad era consecuencia de un enfermedad congénita que por tanto iba a pasar a su futuro bebé, razón por la cuál quiso evitarlo mediante la concepción de este en un laboratorio. Allí el niño probeta surgía con el material génetico de la paciente, de una donante y del futuro papá. El óvulo sería una mezcla de ambas mujeres: se tomaría el núcleo de la paciente, donde se halla el contenido del ADN y se desecharía su citoplasma, que es la parte subsidiaria de esta célula, que sirve para alimentar, proteger y regular el anterior contenido. En esta parte secundaria es donde se encuentran las mitocondrías, en esta paciente defectuosas y causantes de la sordera.
Este núcleo o ADN femenino se añadiría a un óvulo nuevo, el de la donante, a la cuál se el quitaría el núcleo propio para integrar éste. De esta manera el gameto contendría material genético de ambas mujeres, aunque sólo el 0,2% pertenecería a la segunda mujer, mientras que los datos principales seguirían siendo de la primera. Una vez manipulado este óvulo para ser sano se fecundaría con el espermatozoide del hombre y se introduciría en el útero de la mamá.
Esta técnica, la cuál es posible tras haber sido votada por el Parlamento británico, permitiría ser madre a muchas mujeres con enfermedades hereditarias, sin tener que recurrir a óvulos de otras personas y también evitaría que los niños nacieran con estos problemas que sus papás sufren o portan. Cierto es que en las fronteras de esta idea siempre surge la polémica, ¿dónde esta el límite para manipular esta nueva vida? De momento el punto de vista es de lo más razonable ya que no sólo se podría evitar la sordera, sino también la distrofia muscular, el parkinson, epilepsia, diabetes o el desarrollo de una importante cantidad de enfermedades neurodegenerativas ¿No lo haríamos todos por la salud de nuestros hijos?
Por otro lado, surge esta posibilidad de una dos mujeres puedan concebir un hijo que sea biológicamente de ambas, lo que para muchas parejas sería una alegría. No obstante, la maternidad es mucho más que ADN, como todos sabemos, y el debate ético, además, dificultaría el proceso. ¿Qué opináis de esto? Y en cualquier caso, ¿no se trata de un avance genial en materia de reproducción y para la medicina en general?
Imagen| Praisaeng