Como todos sabemos, el ejercicio es imprescindible para sentirnos bien y mantener una buena forma física, aunque para las personas que no están acostumbradas a realizar un ejercicio físico periódicamente, puede costarles un poco acostumbrarse.
Por este motivo, vamos a dar una serie de consejos para que empezar a hacer ejercicio no se convierta en una tarea ardua y aburrida:
– Viste adecuadamente, con telas ligeras, que transpiren y elásticas, así te costará menos trabajo moverte.
– Bebe mucha agua antes, durante y después del ejercicio, ya que si el cuerpo no está acostumbrado a sudar perderás muchos líquidos y sales minerales. También es recomendable tomar alguna bebida isotónica después del ejercicio.
– Empieza con periodos de ejercicios cortos, de 10 a 15 minutos al día, pero es muy importante que los realices diariamente, o no te acostumbrarás. Cuando pasen unas semanas puedes aumentar progresivamente el tiempo de ejercicio.
– Estira muy bien los músculos antes de realizar el ejercicio (para evitar tirones y lesiones), y después (para aumentar la flexibilidad y no tener agujetas al día siguiente).
– Si sientes dolor en el costado o en el pecho durante el ejercicio es que el ritmo que estás siguiendo es muy elevado, relájate y deja que tu corazón disminuya lentamente las pulsaciones por minuto. Nunca pares bruscamente la actividad física o podrías sufrir un desmayo.
– Realiza ejercicios con algún amigo, así será mucho más entretenido y podréis motivaros mutuamente.
Es muy importante que el deporte que realices te guste, ya sea salir a pasear, ir en bici o jugar al tenis, así el ejercicio será más divertido y realizarlo diariamente será todo un placer.