Aumentar la dosis de cereza, te asegura una cantidad de nutrientes necesarios que requiere tu organismo para funcionar en salud, mientras elaboras un plan de alimentación enfocado a prevención de la salud.
La cereza es una fruta de verano y ya está entre nosotros, aunque hoy en día la consigues durante todo el año. Entre los nutrientes que te aporta la cereza, fruta que además es baja en calorías, están la Vitamina C, Magnesio, Hierro, Ácido fólico, Calcio y Vitamina A. Con este dato que te estoy dando, si no consumes cereza es porque aún no has comprado.
Mantener una dieta equilibrada no es fácil, pero es posible, sobre todo prestando especial atención a la composición de los diferentes alimentos; entonces, sabiendo lo que te aporta cada fruta, verdura, legumbre y otros que conforman tu alimentación, armar un plan para mejorar la salud desde una buena calidad de nutrición, es totalmente posible.
Logras armar un buen plan de nutrición y a eso le agregas ejercicio y alegría a tu vida, entonces obtienes la receta perfecta para eludir trastornos de salud con un porcentaje inigualable.
Regresando a la cereza, desde su aporte nutricional elevado, tu organismo se beneficia notoriamente, desde su acción remineralizante, depurativa y antiinflamatoria. Colabora en la eliminación del ácido úrico. Previene episodios de anemia. Es laxante y diurética. Además, colabora en la regeneración celular gracias a sus flavonoides.
Y, si alguna duda te queda para incluir las cerezas en tu dieta diaria, te cuento que gracias al Hierro, Calcio y Vitamina C, previene la descalcificación provocada por los cambios hormonales durante la menopausia, siendo un complemento ideal de un tratamiento durante la pre-menopausia.
