La episiotomía, método por el cual se intenta ampliar el canal de parto para tratar de evitar desgarros y facilitar el pasaje del feto (de la placenta al exterior), sigue haciendo noticia y creando controversias a nivel de la salud aún en estos tiempos. Es que muchos médicos, aseguran que esta práctica quirúrgica no evita la mayoría de los desgarros perianales que se pueden producir durante el parto.
Es tanta la discrepancia entre médicos y parteras, que se ha comprobado mediante estadísticas que más de la mitad de las mujeres, sólo en Extemadura, han sido sometidas a episiotomía (incisión en la zona del periné) durante la labor de parto o alumbramiento, muchas de ellas sin evitar finalmente desgarros. Esto ha llamado la atención de la Organización Mundial de la Salud, por superar ampliamente la cantidad permitida por la entidad. La OMS, sólo permite la realización de la episiotomía en casos médicamente necesarios y no como simple prevención.
Es por ello que las autoridades supremas de la salud, entre las cuales se encuentra el ministerio de salud, apelan a la educación preparto de todas las embarazadas, donde entre otras cosas como mantener una buena calidad de nutrición, se las instruya en la práctica de ejercicio pélvico para promover la elasticidad de los tejidos que conforman la zona del periné, y así conseguir un parto más saludable.
Por su parte, José Miguel Amóstegui (Presidente de la Sociedad Española de Fisioterapia en Pelviperineología) aconseja que la gimnasia pélvica comience a realizarse a partir de la semana 32 de gestación. Los resultados positivos de esta práctica, han sido comprobados médicamente y mediante estadística de partos que se llevan a cabo en los diferentes centros de salud.
En este aspecto, no sólo se trata de mejorar el bienestar de la paciente, sino que además la economía de la salud, ya que el gasto de un parto totalmente natural es bastante menor al que presenta complicaciones.
